Gendarmería llegará a la provincia el jueves
Así lo confirmó Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de la Nación. También agregó que patrullarán las calles e investigarán delitos complejos.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, aseguró que el jueves próximo entrará en vigencia el convenio firmado con la provincia, lo que en la práctica significará la llegada de efectivos de las fuerzas federales a Rosario. Si bien la funcionaria evitó hablar de números —»serán muchos», se limitó a decir— sí se explayó sobre la doble tarea que cumplirán los uniformados: con una presencia visible en las calles, «para que la gente esté más tranquila y se sienta segura», y al frente de investigaciones «que vayan a la raíz de las bandas criminales existentes en la provincia». Al frente del comité operativo que coordinará esta labor estará el director de Inteligencia Criminal de la Gendarmería, Claudio Brilloni.
Bullrich participó ayer de una de las últimas «reuniones preparatorias» para el arribo de las fuerzas de seguridad federales a la ciudad. Durante más de dos horas estuvo en el Palacio de Tribunales Federales, donde mantuvo un encuentro con jueces y fiscales penales y autoridades de Gendarmería y de la Policía Federal; y luego también escuchó a los miembros de los tribunales orales.
A la primera reunión, desarrollada en el despacho del juez federal Carlos Vera Barros, se sumó también el gobernador Miguel Lifschitz y funcionarios provinciales. Según explicó la ministra, en la visita se terminaron de pulir los «detalles operativos necesarios para hacer un equipo de trabajo con mucha celeridad y rapidez con la justicia». Además, recibió un resumen de la actividad de los tribunales de juicio.
En marcha. Tras el encuentro, la funcionaria anunció que desde el jueves próximo se pondrá en marcha del acuerdo firmado por la provincia en materia de seguridad pública. Esto se traducirá en la llegada de efectivos de Gendarmería, Prefectura, Policía de Seguridad Aeroportuaria y Policía Federal, en principio, a las ciudades de Rosario y Santa Fe.
«No vamos a hablar de números, pero van a ser muchos», esgrimió para evitar precisiones sobre la cantidad de uniformados involucrados en lo que denominó como el «Operativo Santa Fe».
Según explicó, los agentes federales tendrán dos formas de intervención en la ciudad. La primera, con operativos de vigilancia ciudadana en las calles para que, con una fuerte presencia, «la gente esté más tranquila y se sienta segura», explicó.
Además, se trabajará en la investigación de los movimientos de las bandas criminales relacionadas al tráfico y comercialización de sustancias ilegales, a través de «un trabajo más en profundidad, de control de las rutas de entrada y la hidrovía». Esta tarea se planificará semanalmente desde el comité operativo que girará bajo las órdenes de Brilloni.
Entre las tareas de investigación, Bullrich destacó la creación de un equipo de trabajo multidisciplinario con funcionarios de la Unidad de Información Financiera (UIF) «para abordar todo el dinero enorme que mueve al narcotráfico, que es un tema preocupante por la magnitud de recursos, como casas, quintas, autos y aviones. Tenemos que sacarle la plata a los narcotraficantes», destacó.
Tras su paso por los tribunales de bulevar Oroño, Bullrich se dirigió a la Terminal Puerto Rosario, donde firmó un convenio para que Prefectura pueda tener presencia en 30 puertos privados de la región .
La «puerta giratoria». La ministra apuntó que durante la reunión se habló también de la posibilidad de ampliar la capacidad de acción de la justicia federal en la provincia. El tema ya se había abordado hace dos días en la primera reunión que mantuvieron autoridades nacionales y provinciales en el batallón de Gendarmería Nacional. Es más, desde la provincia, plantearon la necesidad de llevar a 16 los actuales cuatro juzgados penales que se encuentran activos.
Bullrich indicó que «se conversó sobre la posibilidad de llenar las vacantes» que existen en los Tribunales de calle Oroño. Aunque no dio precisiones sobre concursos o plazos. «Oportunamente se comunicará», se limitó a decir.
Más optimista se mostró en los cambios que puede imprimir la recientemente sancionada ley de flagrancia, agilizando el proceso de enjuiciamiento. «Nos va a permitir hacer juicios en un plazo casi mínimo de 40 días y esto va a ser muy bueno para terminar con la puerta giratoria», sostuvo. La incorporación de la figura de flagrancia al Código Procesal Penal federal formó parque de un paquete de propuestas para combatir el delito convertidas en ley hace dos semanas.
La figura se podrá utilizar para juzgar con rapidez y lograr condenas para los delincuentes aprehendidos en el momento de cometer el delito, alcanzando a ilícitos con penas menores a quince años. (La Capital)