El «Pincharrata», nuevo rey del fútbol argentino
Pese a haber padecido durante la mayor parte del encuentro su falta de peso ofensivo, Estudiantes encontró en Hernán Rodrigo López los goles que le permitieron vencer a Arsenal por 2-0 y consagrarse campeón del Torneo Apertura.
Después más de 70 minutos en los que buscó infructuosamente, a sabiendas de que Vélez ganaba en Avellaneda, el conjunto de Alejandro Sabella encontró la luz a través del delantero uruguayo, quien ingresó en el segundo tiempo y marcó los dos goles que le posibilitaron al conjunto platense sumar su quinto título local.
En una cancha en la que ganó los nueve partidos que jugó, el elenco pincharrata sufrió pero al final pudo festejar un torneo en el que superó distintas contingencias como una gran cantidad de lesiones que menguaron su potencial a lo largo del torneo, pero no pudieron impedir que se llevara merecidamente el campeonato.
En un primer tiempo muy equilibrado Estudiantes nunca encontró en sus individualidades la alternativa para romper el cerco defensivo de Arsenal. A Braña y Benítez les costó ganar en el mediocampo, y Verón y Enzo Pérez, encargados de generar fútbol y abastecer a la «Gata» Fernández, estuvieron erráticos y muy lejos de su mejor nivel en esos 45 minutos iniciales.
Arsenal hizo lo que mejor sabe: apostó a su sólida defensa, jugó rápido por las bandas con Adrián González y Claudio Mosca y utilizó muy bien a Obolo, quien fue su atacante de referencia y una complicación constante para los zagueros locales.
A los 9 minutos, cuando la gente del «Pincha» festejaba, Pablo Lunati, a instancia de un asistente, anuló por posición adelantada un gol a Gastón Fernández. Dos minutos más tarde y tras un tiro libre de Verón que quedó corto, Enzo Pérez remató e hizo lucir a Cristian Campestrini, quien evitó la apertura del marcador.
A los 23 nuevamente Verón sobre el sector derecho envió un centro que Fernández conectó por el primer palo, pero su cabezazo se fue desviado.
El equipo de Sabella intentó pero en la primera etapa padeció la carencia ofensiva que tantos dolores de cabeza le generó a lo largo del certamen.
En el complemento Estudiantes salió decidido en busca del triunfo y fue todo lo vertical que no pudo en la parte inicial.
Arsenal, replegado en su campo, cedió pelota y terreno al local, que de a poco, con buenas apariciones de Enzo Pérez y el peso ofensivo que aportó Hernán Rodrigo López, arrinconó al elenco de Sarandí.
Tras alguno intentos desafortunados de Pérez y Benítez, la ansiada ventaja llegó a los 28 tras un corner de Benítez desde la izquierda que pegó en López y se introdujo en el arco de Campestrini, quien tapado por la «Gata» Fernández, perfectamente habilitado, no pudo reaccionar.
Con la ventaja Estudiantes se replegó peligrosamente sobre su arco, pero Arsenal no encontró la forma de vulnerar el cerrojo defensivo del equipo platense.
A tres minutos del final y cuando López era el único atacante pincharrata, Benítez sacó un centro y el uruguayo se elevó entre los centrales visitantes y con un cabezazo preciso liquidó el partido.
De tanto buscarlo, Estudiantes encontró en un ex Vélez la llave del triunfo para una nueva coronación.